Índice
Si cuentas con una marca, ya seas una empresa o una persona autónoma, necesitas una carta de presentación con la que darte a conocer a tus clientes potenciales. ¡Son las tarjetas de contacto! En estas, se encontrarán los datos para localizarte y las fuentes de información disponibles para consultar la actividad a la que te dedicas. Pero, ¿sabes cómo diseñar una tarjeta de visita?
¿Por qué es importante contar con una tarjeta de visita?
Las tarjetas personales corporativas son, como hemos dicho, una carta de presentación. Puesto que no puedes ir repartiendo un portafolio de tus productos y/o servicios a cada persona que conoces o muestras, las tarjetas de visita son una forma sencilla, pero eficaz y bastante económica, de abrir una vía de comunicación directa con tus clientes potenciales.
Por su tamaño, es muy fácil de guardar, y si tiene un diseño atractivo, resultará más interesante consultar a lo que te dedicas y tal vez propiciar el inicio de una nueva relación comercial. Para ello, tendrás que incluir tu propio logotipo y contar con una imagen corporativa que quede reflejada en la tarjeta.
Y he aquí lo importante, ¿sabes cómo hacer tarjetas de negocios llamativas, pero a la vez claras y precisas? Si no lo tienes del todo claro, ¡ahí van nuestros consejos para crear tarjetas de visita!
¿Cómo diseñar mi tarjeta de visita?
Comenzamos por el formato
El formato de tu tarjeta hace referencia al tamaño que tendrá y su orientación. Es decir, si será horizontal o vertical. El estándar es de 85×55 mm, pero hoy en día son también populares en un formato más pequeño de 70×30 mm; son las llamadas minicards o tarjetas mini.
Estos números son solo una referencia y puedes ajustarlos a tus necesidades o preferencias. Lo que sí debes tener en cuenta es que deben caber en un tarjetero o una cartera.
Qué quieres escribir
El segundo paso para diseñar una tarjeta de visita es la de elegir la información o los datos que se quieren añadir. Aquí se aplica el principio de menos es más. Vas a necesitar tu nombre o el de tu empresa, el logo, un teléfono y un correo electrónico y tus perfiles sociales o la web donde puedan obtener más información.
¿Y debes incluirlo todo sin más en el diseño de tarjetas personales o corporativas? Rotundamente, no. Debes pensar si es una tarjeta nominativa con datos personales o corporativa con información del negocio.
Si trabajas de cara al público, tu dirección será lo más importante; si trabajas exclusivamente online, tu página web, y si lo que importa son tus servicios y no tanto la presentación de tu trabajo, el teléfono o el email serán lo principal.
Crea una distribución equilibrada
Aquí entramos en el meollo de diseñar tarjetas, puesto que aquí no solo se mira la estética, sino aspectos técnicos. Estos son los que desarrollarán una estructura que sea organizada, clara y agradable a la vista; debe facilitar la lectura y, al mismo tiempo, guiar la mirada hacia los detalles que queramos resaltar.
Esto se consigue jugando con los tamaños de las letras, la tipografía, los colores utilizados o las formas, que son los aspectos siguientes a valorar al diseñar una tarjeta de visita.
Tamaño y tipografía
Las tarjetas de visita tienen un tamaño reducido, así que si deseas que te queda toda la información a incluir, las letras también tendrán que serlo. Sin embargo, debes garantizar la legibilidad. Igual que sucede con una página web, si alguien tiene que esforzarse por obtener información sobre ti o para leer la que ofreces, es bastante probable que pierda el interés.
El tamaño estándar va entre los 7 y los 11 puntos, puesto que con cada fuente el resultado varía. Además, tendrás que hacer que las letras resulten armónicas con el resto de elementos y que todo quepa dentro del recuadro. En las pruebas de impresión es donde mejor se aprecia el resultado. En lo que respecta a la tipografía, lo adecuado es utilizar una o dos como máximo.
Incluye tu imagen corporativa
Si eres una marca y cuentas con un logo definido y utilizas una paleta de color específica en tu página web, perfiles sociales e incluso publicidad, estos elementos también deben formar parte del diseño. De esta manera, lograrás que haya una coherencia en tu imagen.
Materiales y texturas
Una vez que has logrado combinar todos los elementos mencionados hasta ahora y el resulte combina la armonía con la estética y la originalidad, es hora de pasar a los detalles finales, que son el material y la textura del papel elegido. Aquí también hay sitio para la creatividad y podrás jugar con efectos visuales y con el tacto. El mundo de la impresión se ha diversificado en gran medida en los últimos años y hay múltiples opciones entre las que elegir.
Como ves, diseñar una tarjeta gráfica tiene su complejidad, y más si quieres personalizarla para que sea única y con un estilo propio, pero que a la vez vaya acorde con tu imagen de marca. Si buscas empresas de diseño gráfico en Valencia, en Global Brand nos especializamos, entre otros servicios, en la creación de una imagen corporativa.
Esta incluye todos los aspectos visuales que construyen la identidad de una empresa, pero también los medios que se utilizan para su difusión, como es el caso de la tarjeta de visita. Si quieres desarrollar o cambiar tu imagen y diseñar herramientas para darla a conocer, puedes consultar algunos de los trabajos que hemos realizado en nuestra web o contactar directamente con nosotros.